martes, julio 08, 2008

140 caracteres

No sé si es un vicio pasajero, un reto temporal o una necesidad canalizada, pero me he introducido con fuerza en twitter de la mano de Fernando.

Todavía estoy en fase de experimentación, así que me resulta difícil (y precipitado) extraer conclusiones definitivas. Además, no tengo la intención de teorizar sobre el fenómeno, pero sí me gustaría reflexionar sobre algunos puntos.

Con twitter, estoy conectado con Fernando (y con Amalia, ¿y con Mari Cruz? y con todo el que quiera seguirme y/o al que yo quiera seguir) de una manera novedosa y más potente en ciertos aspectos que el correo electrónico.

Tipo de comunicación

Yo no envío un mensaje a una persona, a un grupo, o a todos mis contactos, sino que escribo algo que deposito y que recibe todo aquel que haya decidido seguirme o que visite mi página en twitter.
En ese sentido, es como publicar en un pequeño blog (microblog): los lectores reciben una notificación cuando se actualiza o lo visitan cuando quieren.
Sin embargo, no es necesario abrir ningún correo para ver una actualización: twitter te presenta encadenados los mensajes de las personas a las que sigues con los tuyos propios.

Longitud de los mensajes
Cada entrada o twit está limitada a 140 caracteres. Sólo por eso, todas las empresas deberían obligar a sus empleados a utilizarlo en aras de una mayor creatividad, concreción, precisión y selección del lenguaje.
A mí, eso me ha fascinado.
Me ha recordado los libros de haikus que me llevo a Japón y me ha parecido una oportunidad para escribir algunos, tratando de captar la esencia del momento presente.
Se lo comenté a Fernando, o, mejor dicho, lo escribí en un twit, Fernando lo leyó y me envió un mensaje directo (que también se puede hacer) para comentarme que existe una herramienta similar a twitter llamada jaiku...
La ventaja de los mensajes cortos es que los puedes escribir en cualquier momento y también en cualquier lugar, si dispones de un dispositivo portátil o móvil.

Tipo de contenido
Yo escribo una frase sobre lo que estoy haciendo, lo que estoy pensando, lo que estoy leyendo, un link a las páginas web que estoy visitando, lo que estoy escuchando y, desde hoy, alentado por Héctor, el otro gurú de la Agenda Estratégica, escribo algunas reflexiones personales que hemos denominado conjuntamente "mystic thoughts of the day"...

Es como llevar una moleskine permanente cuyo contenido deseas compartir.

Anímate, ¡sígueme en twitter!

4 comentarios:

Mcruz dijo...

Poniéndome al día: ya estoy conectada contigo, ¿me seguirás? sería un honor para mí.
Aunque realmente me prodigo poco en el twitter, todo hay que decirlo. Me fascinan las nuevas herramientas 2.0, pero creo que no tengo el "ego" lo suficientemente desarrollado como para utilizarlas desde el punto de vista personal.

Tu, desde hoy, fiel seguidora
MCruzz

Fernando Polo dijo...

Rómulo,

Primero me alegro de que le estés cogiendo gustillo. En serio que es algo más importante de lo que parece desde fuera. Esa moleskine. A mí, por ejemplo, me flipa revisar reflexiones de hace un año.
También estoy muy de acuerdo (no sé si lo hablamos juntos), respecto al tema de la concisión. Es una magnífica herramienta para aprender a escribir ideas complejas con pocas palabras. Se pueden escribir novelas! ;-) O al menos relatos Xcortos.

Mcruz,
No es un tema de ego (hay gente con poco ego, haciendo un uso sencillo y divertido de las herramientas). Es un tema de encontrarle el sentido, el para qué, y no pasa nada por no encontrárselo.

Siga buscando, hay cientos de premios!

Anónimo dijo...

En Twitter se tienen algunos seguidores invisibles, aquí una :-)

Por asociación, le he referenciado por lo de la invisibilidad...

A ver si se estira y escribe más en el blog ;-)

Saludos,
Lles a.k.a. Eken

Anónimo dijo...

Hola Rómulo!
Me acabo de enganchar al twitter! ya te contaré la experiencia, seguro q está medio mundo metido como en facebook...