lunes, diciembre 03, 2007

Claudia


Desde hace unos diez meses, hay un nombre que constituye uno de los sonidos más dulces que yo pueda escuchar. Es un nombre de mujer y es el de mi sobrina: Claudia.
Otra palabra cargada de belleza para mí es el nombre de mi amor: A… Es curioso que cumplan años el mismo día, aunque con un mes y una treintena de años de diferencia…

La foto de este post la tomó mi hermano David en Denia. Era nuestra primera Semana Santa con Claudia. Recuerdo perfectamente el momento en que la tomé en mis brazos y cómo se quedó dormida sobre mi pecho.
Para mí es uno de los momentos esenciales de mi existencia.
Lo escribo sin dudarlo.
Sostener a un ángel en postura de “caída libre” (con las piernas y los brazos abiertos), sentir el calor de su cuerpecito sobre el mío, el ligero vaivén de su respiración, el tacto de la piel de su carita sobre la mía… fue una experiencia que me colmó.
De Felicidad y de Amor.
Le di las gracias a la Vida por sentir esa pureza; esa intensidad.
Y lo sigo haciendo hoy.

2 comentarios:

Mariluz dijo...

Hola Rómulo, qué bonitas palabras escribiste y qué razón tienes, no hay nada comparable a un momento así. Mi hija también se llama Claudia y tu foto me recuerda a cuando nació. Mañana cumple 3 añitos. Disfruta de tu sobrina, que el tiempo pasa volando.
Un saludo.

Blógmulo dijo...

Gracias por pasarte, MariLuz!

Qué nombre tan bonito tiene tu hija... :-)